Es muy habitual que cuando llevas un tiempo haciendo deporte, escuchar al resto de gente con las que entrenamos hablar sobre suplementos, y nos empieza a entrar la curiosidad de si nos son necesarios o no. Empezamos a buscar por redes o a preguntar y nos comentan que son para conseguir o mantener músculo, proteger articulaciones o huesos, perder peso, etc. Pero, ¿es cierto todo esto? ¿Es necesaria la suplementación cuando se hace deporte? En este artículo intentaremos explicarte para qué sirve cada suplemento, y saca tus propias conclusiones.
Este "suplemento" muchos lo hemos tomado cuando te mandan antibióticos, ya que lo que hace es mantener la microflora intestinal, y asi mejorar tu sistema inmunitario, y al prevenir problemas gastrointestinales, el resultado es muy bueno en el deportista a la hora de rendir.
Se suele utilizar para ejercicios de larga duración, ya que lo que produce es estimular el sistema nervioso central. Lo recomendado es entre 3 y 6 miligramos por kilo o 3 tazas de café diarias o té verde, eso si, deberías conocer primero tu cuerpo y saber si toleras tal cantidad de cafeína ya que puede crear efectos adversos.
Es un suplemento utilizado por deportistas de fuerza y velocidad, ya que se recomienda para ejercicios de duración corta, de alta intensidad y explosivo. Se utiliza para mejorar tu masa muscular, y se puede tomar antes o después del entreno. Realmente la creatina la fabrica tu cuerpo, y la puedes encontrar en carne y pescados, pero al parecer se concentra en pequeñas cantidades.
Es un aminoácido no esencial, su función es transportar el nitrógeno para que pueda desempeñar las actividades metabólicas del cuerpo. Su beneficio es que te ayuda a recuperar de una actividad física. ¿Quién lo debe tomar? Se recomienda a deportistas que hagan actividades de largo recorrido, tipo maratones, ya que la idea es evitar la degradación de las proteínar y mejorar nuestro sistema inmunitario. ¿Dónde conseguir este aminoácido? En carnes, lácteos, verduras de hoja verde y frutos secos.
Son moléculas que se combinan para formar proteínas, y ambos (aminoácidos y proteínas) son fundamentales para la vida. Estos se encargan de recuperar el músculo y equilibrar la glucosa. Se encuentran en la carne, huevos, suero de la leche o pescados, también los puedes encontrar en geles, líquidos y capsulas, y si tienes pensado consumirlos, lo ideal es antes, durante o después de tu actividad.
Es un aminoácido no esencial que transpora los ácidos grasos al interior de las mitocondrias, que estas se encargan de suministrar la energía a las células. Se almacena en el músculo principalmente. Ante una actividad intensa, aumenta la oxidación de las grasas, reduce la fatiga muscular y los niveles de lactato, también puede mejorar la recuperación.
El ácido omega 3 tiene propiedades antiinflamatorias, esto quiere decir que previene problemas de ligamentos y articulaciones, mejora el sistema inmunitario y colabora en el mejor aporte de oxígeno a los músculos. Una de las cosas por las que se ingiere es porque es recomendable para incrementar el rendimiento aeróbico y la fuerza. Lo puedes obtener comiendo frutos secos, salmón, semillas, aceite de oliva o de vegetales, pescado azul, marisco, aguacate, verduras de hoja verde, atún, crema de cacacahuete o avena.
La Glucosamina es la responsable de reparar los cartílagos y articulaciones dentro de nuestro esqueleto. Los beneficios que tiene es que fortalece y mantiene nuestras articulaciones, disminuyendo el desgaste que nos produce el ejercicio como el riesgo de lesiones. Tiene capacidad de actuar como antiinflamatorio y lo puedes encontrar en los camarones, langostas o el cangrego (crustáceos en general), también de cartílagos del tipo orejas, callos, morro y en hongos. De forma suplemento, lo pueedes encontrar en cápsulas y polvo.
Teniendo una nutrición equilibrada se puede obtener las cantidades necesarias para tu cuerpo, si haces deporte de intensidad o muchos días a la semana, lo ideal es que vayas a un especialista por si te falta ese plus de suplementación. ¡A seguir entrenando!