Para mejorar en los entrenamientos no solo debemos tener en cuenta que hacer durante el ejercicio, también debemos tener en cuenta qué hacer antes de este.
Para estar lo más preparado posible debemos tratar dos puntos. Primero la alimentación e hidratación y lo segundo es el calentamiento.
Alimentación e hidratación: ayuda a que el cuerpo tenga la energía necesaria para realizar cualquier actividad.
- Para recorridos largos: debemos consumir alimentos ricos en hidratos de carbono con alto contenido calórico.
- La hidratación: debe de ser tomada en cuenta diariamente. Debes de tener una orina clara y debes de beber una mayor cantidad de agua durante 4 horas antes del ejercicio intenso. Durante la rutina de carrera debes ingerir medio litro de agua por cada hora.
- Para evitar el cansancio: puedes consumir pequeñas cantidades de hidratos que aumenten tu nivel de azúcar en distancias largas. Aproximadamente unas 30 a 60gramos de hidratos.
- La digestión: debe respetarse para que el flujo de sangre se estabilice y pase del sistema digestivo hacia los músculos. De esta manera, tras las tres comidas grandes del día debes esperar unas 2 horas antes de comenzar con el entreno.
- Los alimentos diarios: afectan al rendimiento en la carrera por lo que es necesario tener una alimentación rica en frutas y vegetales que aportan antioxidantes que ayudan la restauración celular.
- Las proteínas: también deben ser consumidas durante las carreras y no solo en la dieta diaria.
Calentamiento: activa el cuerpo y le advierte de la proximidad de un ejercicio con mayor exigencia.
- Subir la temperatura corporal: evitaremos de esta manera las lesiones y prepararemos al cuerpo para el ejercicio.
- Activar la circulación: haciendo skipping o saltos de baja intensidad que fortalecen la musculatura.
- Nunca estirar antes del ejercicio: debemos dejarlo para después del entrenamiento ya que su finalidad es la de relajar la musculatura que ya ha trabajado y está contraída además de ayudar a favorecer la flexibilidad.